Las Urgencias canarias llevan semanas ocupando portadas y titulares que hablan de pasillos repletos de pacientes y avisos de colapso. Ana Pérez es médico de Urgencias del Hospital de Fuerteventura y delegada sindical del Sindicato Profesional de Médicos de Las Palmas en la Isla. Asegura que, si se compara el servicio majorero con, por ejemplo, el de Gran Canaria, el de Fuerteventura está mejor, pero reconoce que “la presión asistencial es bastante alta” y aboga por incrementar la plantilla en cinco o seis médicos más. También defiende medidas que frenen la huida de especialistas de la Isla. “Hay que hacer algo para que se favorezca el hecho de que la gente quiera venir y, sobre todo, hacer que el que venga no lo perdamos”, subraya.

-¿Cuál es la realidad sanitaria en Fuerteventura, en estos momentos?

-Creo que, no solo a nivel de Fuerteventura sino en Canarias y en España, es una situación bastante compleja con mucha presión asistencial, tanto en los centros de salud como en las Urgencias hospitalarias, que están siempre colapsadas. Hay una demanda muy alta y eso se refleja a nivel de hospitalización y de las plantas.

-¿En qué situación se encuentra la Atención Primaria en la Isla?

-Desde hace muchísimos años trabajo en Atención Hospitalaria con lo que la Primaria me queda un poco más lejos. Sin embargo, me llegan comentarios de compañeros y también lo que se oye a nivel general. Ellos me comentan que la Atención Primaria está saturada y que no está funcionando bien. Vemos que hay muchísima demora en las citas con lo que eso implica, que es que se sature muchísimo más tanto las Urgencias de los centros de salud como las hospitalarias.

-En las últimas semanas, hemos visto titulares que hablan de situaciones de colapso en las Urgencias de las Islas y pacientes en los pasillos. ¿Está colapsada el área del Hospital de Fuerteventura?

-Si se compara, por ejemplo, con Gran Canaria estamos bastante mejor, pero es cierto que la presión asistencial es bastante alta. Hay demoras porque hay mucha presión asistencial. Estamos haciendo muchos más turnos para poder cubrir todos los turnos que hay.

-Entonces, ¿hay problemas para cubrir las Urgencias?

-Tenemos menos gente de la que debe estar. Ahora mismo, podemos ser entre cinco y seis menos de los que deberíamos estar en plantilla. Ha habido gente que se ha marchado y otra que está de baja.

-¿Hay pacientes en los pasillos de Urgencias del hospital majorero?

-Nosotros llamamos pasillos a un área que se rehabilitó hace unos años. Realmente es un área nueva, pero no adecuada al servicio. Era una especie de pasillo que se adecuó. Aparte hay pasillos como tal y depende de los días hay pacientes ahí o no, pero están en el área de Urgencias. No están en los pasillos de tránsito.

-¿Qué deficiencias percibe en Urgencias del Hospital?

-Es fundamental conseguir más personal. Eso es básico para empezar. Tener un servicio bien dotado de personal permite dar un buen servicio y también es necesario tener tiempo para formarte y luego brindar esa formación a los pacientes. La base está en conseguir personal suficiente y formado y que pueda seguir reciclándose.

-El Hospital de Fuerteventura tiene en torno a una decena de personas viviendo en sus instalaciones. ¿Hay en Urgencias?

-En Urgencias puede haber cuatro o cinco. Hay alguno desde hace muchísimos meses. En planta también sé que hay, pero no sé exactamente el número.

“Tenemos servicios pequeños y cuando alguien se va se nota mucho”

-¿Cómo afecta al trabajo de los profesionales tener a estas personas en el hospital?

-Creo que a quien menos afecta es a los profesionales. No es un paciente como tal, sino una persona que se queda por un tema social. El más afectado es el propio paciente porque está en un sitio donde no se cumplen las condiciones mínimas para estar. Pueden ser personas que sean válidas y las tienen metidas en una cama sin poder hacer vida social o personas que no sean válidas y están en una cama sin estimulación. Además, estamos todos pagando una cama sanitaria cuando realmente es una cama social. Se deriva una cantidad a pagar unas camas sanitarias cuando realmente no necesitan una atención sanitaria, sino una atención social en condiciones. No afecta al facultativo porque no tienen una enfermedad que se tenga que atender, pero afecta al día a día porque está ocupando una cama que puede necesitar cualquiera. Además, lleva un trabajo para personal como auxiliares o celadores.

-¿Qué especialistas son los más necesarios ahora en la Isla?

-Seguramente haya más servicios con necesidades, pero a mí me llega que hacen falta en Cirugía, en Medicina Interna y luego servicios que se quieren ampliar como Reumatología, que solo tiene una reumatóloga que está pidiendo que crezca su servicio y poder trabajar mejor y que no haya lista de espera. En Urgencias, estamos con déficit de muchos médicos. Harían falta cinco o seis facultativos para tener la plantilla que teníamos. Han ido a menos y ahora estamos cinco o seis por debajo de lo que estábamos. Es verdad que luego hay plantillas que están en el número que necesitan.

-Coalición Canaria y Partido Popular han denunciado la pérdida de especialistas de áreas como Neurología o Anatomía Patológica en Fuerteventura en los últimos meses. ¿Le consta que se estén yendo especialistas?

-Se van especialistas, pero siempre se han ido. Es un tema cíclico. Llega gente y se va gente. No sé la formula, pero creo que hay que favorecer, de alguna manera, que quien viene a la Isla se enganche y se quede. Es un problema serio. Tenemos servicios más pequeños que en Islas capitalinas y cuando alguien se va se nota mucho.

-¿Y por qué se están yendo?

-No hay un único motivo. Hay desde motivos personales a laborales distintos. Hay personas que buscan un servicio más grande para trabajar. Esto es pequeño y la forma de trabajar es diferente. Hay quien se adapta y quien no. También está el tema de afianzar el tipo de contrato, el tema de las interinidades y el que la gente se sienta a gusto y estable en los servicios. Todo eso influye.

-Sanidad se escuda en que no encuentra especialistas que quieran venir a Fuerteventura. ¿Realmente cree que es así?

-Creo que somos pocos médicos. Es difícil encontrarlos, pero también es difícil en las Islas capitalinas. Allí también falta gente y no consiguen completar las plantillas. Si en una isla capitalina no las completan, en una isla pequeña, normalmente, se complica más. Por eso, creo que hay que hacer algo para que se favorezca el hecho de que la gente quiera venir y, sobre todo, hacer que el que venga no lo perdamos.

“Hacen falta especialistas en Cirugía, Medicina Interna y Reumatología”

-En julio se dejó de dar cita para Medicina Interna, salvo los casos de sospecha con patologías graves hasta que se pudo traer a un internista en diciembre, pero poco después se fue. ¿Cuál es la situación en estos momentos?

-Son menos de los que tenían que estar. Ahora mismo, creo que hay seis, pero hay una que no hace guardia. En el día a día siempre son menos. Ese es el problema. Hay que dar vacaciones a la gente. Se hace una guardia y se libra al día siguiente. De los seis que están, por un motivo o por otro, a diario hay menos. Y eso se nota. Se va sacando adelante haciendo más turnos, pero eso es complicado. Puntualmente se puede escapar de esa manera, pero llega un momento en el que no puedes dar más.

-Fuerteventura lleva años reclamando una Unidad de Hemodinámica ¿Cómo está afectando al paciente de la Isla el retraso en su instalación?

-Quizá ahora estemos en el número suficiente como para que haya un servicio de hemodinámica en la Isla, pero cuando el número de infartos diarios son pocos y se crea una Unidad de Hemodinámica y el hemodinamista que está haciendo la técnica no trabaja a diario también es un problema. A todos nos gustaría tener de todo donde estamos y que nuestra Isla tenga lo más puntero, pero no siempre eso es bueno ni siquiera para el paciente. En este caso, no sé si años atrás era conveniente tenerlo o no. Quizá ahora estemos en unos números más cercanos en los que compensa. Es decir, que la persona que esté allí haga la técnica las suficientes veces como para tener una destreza de que si llega un paciente lo haga con una cierta garantía. Necesitas ser muy hábil y eso te lo da practicar a diario. Un hospital que tenga hemodinámica puede hacer seis, siete y diez cateterismos al día. No es lo mismo hacer uno cada tres días o uno a la semana. Cuando el número de pacientes que hay para hacer esta técnica es bajo, compensa más trasladarlo.

-El Servicio Canario de Salud (SCS) anunció la renovación de profesionales de Atención Primaria y Hospitalaria que fueron contratados durante la pandemia. ¿Sabe si ha sido así?

-En el tema de médicos supongo que estarán todos renovados. Como hace tanta falta personal no creo que haya gente que esté parada. No sé de médicos que quieran trabajar y no estén trabajando en Fuerteventura. Dudo que haya paro de médicos en Canarias.

-En las últimas semanas, hemos conocido la historia de un alergólogo al que Sanidad ha anunciado que no renovará el contrato a pesar de que, según denuncia, la lista de espera es elevada y se le prometió estabilidad. ¿Qué opinión tiene sobre el tema?

-Al Sindicato Médico, hasta donde yo sé, no ha llegado ninguna queja ni nada de qué ha pasado con ese contrato. No sé qué tipo de relación laboral tenía ni sé qué ha pasado, pero si tienes un contrato de sustitución lo normal es que cuando acabe la sustitución puede que no se renueve porque no se necesite. En este caso, no sé.

-¿Están en desventaja los médicos canarios con respecto a los profesionales que trabajan en Península?

-El tema es que no hay homogeneidad en las diferentes comunidades. Los contratos no son exactamente iguales, ni las retribuciones ni las formas de trabajar. Quizá eso sí se debiese unificar. Debería haber alguna fórmula de incentivar al que viene a las islas no capitalinas. Tal vez, puntuando, para la hora de opositar, con más puntos. Es una reclamación de hace muchos años, pero hasta ahora no se ha conseguido.