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Una app para pedir citas en barberías con sello majorero da el salto a Latinoamérica

El joven Daniel Villalgordo ha creado GoBarber, una aplicación móvil con más de 80 peluquerías inscritas, repartidas por Canarias, Península y América Latina. El siguiente objetivo es llegar a los Estados Unidos

Fotos: Carlos de Saá.
Eloy Vera 0 COMENTARIOS 20/02/2021 - 09:53

Mientras le cortaba el pelo, el teléfono del peluquero no paraba de sonar con llamadas y WhatsApp. Fue ahí cuando se le encendió la bombilla y pensó en poner la tecnología móvil al servicio de las barberías. Planteó la idea a su barbero, Félix, y aceptó. Un año después, GoBarber, una aplicación (app) para gestionar citas en barberías, ha conseguido sumar más de 80 peluquerías situadas en lugares del mapa como Canarias, Península y Latinoamérica. El sueño de su inventor, Daniel Villalgordo, de 27 años, es ahora dar el salto a los Estados Unidos.

La curiosidad y la inclinación por la tecnología han acompañado a Daniel desde hace años. Ese interés le llevó a mudarse a Madrid para estudiar el ciclo formativo de grado superior de Desarrollo de Aplicaciones Multiplataforma y a estar, ahora, intentando finalizar la carrera de Ingeniería Informática. “La posibilidad de programar me daba la oportunidad de crear cosas propias sin tener que contar con muchos recursos. Al principio, empecé con proyectos pequeños”, recuerda.

Tras terminar el ciclo formativo, se le presentó la posibilidad de trabajar en una empresa en Madrid. Era el año 2017 y la tecnología parecía una buena aliada para reducir las colas del desempleo con vacantes en empresas que buscaban programadores capaces de idear aplicaciones que hicieran la vida más fácil. Sin embargo, Daniel optó por el camino del emprendedor y decidió crear su propio negocio: Gofio Tec, un proyecto destinado a hacer aplicaciones para telefonía móvil, al que bautizó con la palabra gofio con la intención de que la iniciativa tuviera sello canario.

El primer proyecto fue crear una aplicación para las farmacias de la provincia de Las Palmas que contuviera información de sus horarios y de los establecimientos de guardia. Luego, llegó la oportunidad de montar una para el Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid que sirviera para localizar materiales de construcción según determinadas características. El siguiente trabajo vino desde el Cabildo de Fuerteventura bajo el nombre de ImpresionArte, una aplicación informativa para la Escuela Insular de Música.

El proyecto más ambicioso apareció en julio de 2019. Daniel cuenta que “la idea surgió un día en la barbería de Félix”, su peluquero. “Mientras me cortaba el pelo, observaba cómo su teléfono no paraba de sonar. Lo veía congestionado con el tema de las citas”. Y añade “al final, todo eso crea una mala experiencia para el barbero y para el cliente”.

Mientras le retocaban el pelado, pensó que la solución para Félix y el resto de los barberos que viven pegados al móvil recibiendo llamadas de clientes era crear una aplicación que sirviera para reservar citas. Propuso la idea a su peluquero y este se mostró partidario. “Lo probamos en mi barbería, a ver cómo va”, recuerda que le dijo su barbero.

El siguiente paso fue ponerle nombre a la aplicación. Al final, se decantó por GoBarber. Luego, llegó la hora de empezar a instalarla con dispositivos para Android e IOS. La iniciativa resultó una herramienta sencilla y eficaz que conecta a los clientes con la agenda del peluquero y deja a este libre de ajetreo. Al final, solo debe preocuparse de ir a trabajar con la agenda llena.

“El barbero se registra en la aplicación, pone los horarios y servicios que ofrece y, luego, el cliente pincha en el mapa la barbería y puede pedir cita”, explica el programador. “El 30 por ciento de la aplicación la conforman mis ideas, el resto es de los barberos. Tengo muy en cuenta lo que me van diciendo. Si me piden nuevos contenidos, los desarrollo. Trabajo para los clientes y no para mis propias ideas”, sostiene.

Sin apenas recursos para poder lanzar una campaña de publicidad, tuvo que recurrir al boca a oído. Un año y medio después, la idea funcionó a tenor de los resultados. En un año, pasó de contar con dos peluquerías inscritas a más de 80, cinco en Fuerteventura, y otras tantas en Lanzarote y el resto repartidas por Galicia, Madrid, Cataluña, País Vasco, Andalucía, Valencia... Y cuatro al otro lado del Atlántico: dos en Paraguay y otras tantas en Argentina. La cuenta de Instagram la siguen más de 1.400 personas.

“Los barberos han acogido la iniciativa con agrado. La aplicación les está permitiendo vivir más tranquilos y no tener que estar pendientes de contestar, incluso de noche, a llamadas y WhatsApp. Lo único que tienen que hacer es estar atentos a ofrecer un buen servicio al cliente”, sostiene.

La aplicación es sencilla de manejar, incluso para aquellos que reniegan de las tecnologías. Contiene la información de cada peluquería: dirección, horarios... Y desde la aplicación se permite al peluquero cerrar el día de la cita, cambiar los horarios, aplicar descuentos o controlar las ausencias de cada cliente por faltar a una cita.

El salto de GoBarber a Latinoamérica llegó en 2020 para “probar cómo funcionaba la aplicación en otro país, sobre todo con el tema del cambio de horarios, con la intención de lanzar la aplicación en el futuro a Estados Unidos”, explica.

“Ser comercial de tu propia aplicación es bastante complicado”

Daniel espera que el salto norteamericano no esté lejos. “Desde que inicié el proyecto he tenido la ilusión de pasar por alguna de sus calles y ver la pegatina de GoBarber pegada en una barbería. Esa es mi ilusión y la mayor motivación para meterme en Estados Unidos”, confiesa mientras recuerda el viaje frustrado que tenía programado para el pasado mes de septiembre al país americano y al que tuvo que renunciar por culpa de la pandemia.

Aunque ahora empieza a saborear los éxitos del proyecto, el joven reconoce que los inicios fueron duros. “Ser comercial de tu propia aplicación es bastante complicado porque, después de contactar con 20 barberías, a lo mejor solo se puede conseguir una”, explica.

Daniel empezó recorriendo barbería por barbería, ofreciendo la aplicación. Vio que aquello no funcionaba y, tras pensar varias estrategias, decidió optar por Instagram. A través de la cuenta, lanzó un mensaje predefinido a los barberos y, a partir de ahí, comenzó la conversación con los clientes. A su favor, juega que muchos de los peluqueros en estos momentos son jóvenes y asiduos a esta red social.

A través de las redes sociales, ha podido ir dando a conocer su trabajo. Al principio, tuvo miedo a que la Península se cerrara a apoyar un proyecto de la periferia del mapa, “sin embargo, me ha sorprendido el acogimiento y me ha hecho cambiar mi manera de pensar sobre este tema”, confiesa.

Detrás de GoBarber hay muchas horas de trabajo y dedicación. También renuncias a salir de fiesta o a poder quedar con los amigos para comerse un bocadillo, hábitos a los que muchos jóvenes no están dispuestos a renunciar, pero a los que Daniel dice ‘no’ con el fin de que su proyecto siga creciendo. “Hay que echarle muchas horas y hacerlo con mucho amor”, asegura. “Busco, sobre todo, estar orgulloso del trabajo y no tanto de lo económico”, añade.

A pesar de que la sociedad majorera ha logrado entrar en el mundo tecnológico, Daniel reconoce que su oficio de programador sigue siendo aún un desconocido para muchos. “Es una profesión que no terminan de conocer y, sobre todo, de entender. No saben cómo se puede vivir de ello y trabajar para sí mismo. A veces, nos miran como si no hiciéramos nada, cuando probablemente trabajamos tres veces más que el resto”.

Falta asesoramiento

Los inicios de los emprendedores en Fuerteventura tampoco son fáciles y suelen venir acompañados de un largo camino de obstáculos. Daniel considera que hacen falta más puntos de asesoramiento para que “no tengan que buscarse la vida solos”. Incluso, plantea la necesidad de crear un local donde “nos podamos reunir todos los emprendedores y compartir conocimientos, experiencias y crear sinergias”.

También echa en falta una mayor implicación de las instituciones majoreras apoyando proyectos tecnológicos y creando iniciativas que pongan la tecnología al servicio del ciudadano. “Las instituciones de Fuerteventura están en modo dinosaurio, con tecnologías ineficientes y antiguas”, lamenta.

La idea de Daniel es seguir creciendo con GoBarber y poder llegar a tener capacidad para contratar a otras personas y delegar trabajo. Eso le permitiría embarcarse en nuevos proyectos, siempre vinculados a la tecnología móvil. De momento, cuando no está en el gimnasio o comiendo, está “trabajando”. Es la disciplina que se ha propuesto para alcanzar la meta de vivir haciendo lo que más le gusta: acercar la comodidad de las nuevas tecnologías a la ciudadanía.

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