Marruecos ha adjudicado a la compañía ENI los permisos para realizar sondeos petrolíferos frente a las aguas de Lanzarote y Fuerteventura. Las prospecciones ocuparán un área de 23.900 kilómetros cuadrados en una profundidad de 1.000 metros.

La empresa ha recibido el permiso después de que Marruecos haya llevado a cabo análisis batimétricos y sísmicos "de muy alta resolución y con equipamiento técnico adquirido en 2015".

Los sondeos se realizarán en frente a las ciudades de Sidi Ifni, Tan Tan y Tarfaya. La compañía italiana ENI tiene el 75 por ciento de participación en estos depósitos y el resto está controlado por Onhym, la Oficina nacional de hidrocarburos y minas de Marruecos.

Además, las autoridades marroquíes han anunciado la creación de la zona industrial de Tarfaya que costará ocho millones de euros y contará con 35 hectáreas para saneamiento, electrificación, cableado de telefonía e iluminación pública y estudios de ingeniería civil.

El permiso de exploración, concedido a ENI, ocupa un área de 23.900 kilómetros cuadrados en una profundidad de 1.000 metros

La adjudicación de las prospecciones por parte de Marruecos se conoce después de que Canarias Ahora desvelara que buceadores profesionales de Lanzarote y Fuerteventura detectaran explosiones que concordaban con las de sondeos petrolíferos.

Lanzarote y Fuerteventura manifestaron su rotundo rechazo a la investigación de hidrocarburos cerca de sus costas tras la autorización a Repsol para efectuar perforaciones. Aquellos sondeos se llevaron a cabo a escasas decenas de kilómetros de las costas de ambas Islas.