DESTACAMOS

La zona sur, el agujero negro de la dependencia en Fuerteventura

La falta de centros de día, de residencias y de personal en las empresas que prestan la ayuda a domicilio merman la calidad de la asistencia a los usuarios

Eloy Vera 11 COMENTARIOS 12/09/2023 - 07:28

El Estudio sobre las necesidades de recursos y servicios de atención a las personas mayores con dependencia de Fuerteventura, realizado por el Cabildo y presentado en 2022, alertaba del aislamiento que sufría la zona sur en materia de dependencia. Un año después de publicarse el informe, la situación sigue siendo similar.

Las personas mayores y cuidadores de los municipios de Tuineje y Pájara se enfrentan a la falta de recursos de apoyo como centros de día y residencias sociosanitarias. Además, existen zonas del sur en las que se dificulta la Ayuda a Domicilio de Dependencia del Gobierno de Canarias por falta de personal en las empresas acreditadas para prestar el servicio.

El sociólogo Cristian Sima fue el encargado de realizar el estudio. Asegura que la zona sur es “la gran olvidada en una isla en la que, de por sí, está olvidada la dependencia” y añade que, sobre todo, en Pájara hay “un aislamiento total”.

En el informe alertaba de cómo los recursos disponibles para personas mayores con dependencia se concentran en la zona centro de la Isla “y eso dificulta su acceso debido a las enormes distancias”. “El sur, especialmente Costa Calma y Morro Jable, está totalmente aislado de los recursos y de algunos servicios. No hay centros de día ni residencias en el municipio”, señala.

En una entrevista con Diario de Fuerteventura, Cristian pone sobre la mesa la importancia de dotar de centros de día a los distintos municipios. “Es un recurso que se demanda mucho. Es cercano y funcionaría bien en la Isla”, argumenta. El sociólogo explica cómo todavía una parte de la población majorera no está aún concienciada en dejar a su familiar en una residencia porque “piensan que es un abandono”. En cambio, el centro de día “es un recurso que se valora mucho, pero no está cubierto en la zona sur”, lamenta.

Manuela Quintero tiene 72 años. Sufre sordoceguera, deterioro cognitivo y problemas de movilidad. Tiene reconocido un 96 por ciento de discapacidad. Su familia se las ingenia para poder cuidar de ella y no dejarla sola cuando tienen que cumplir con sus trabajos. Penélope Vázquez es una de sus hijas. Reconoce que poder llevar a su madre a un centro de día serviría de respiro para la familia. Sin embargo, en el municipio de Tuineje no existe este tipo de recursos.

Tras una década de debate entre las instituciones buscando su posible ubicación, el nuevo gobierno en el Cabildo de Fuerteventura anunciaba que la residencia sociosanitaria y centro de estancia diurna para personas con discapacidad intelectual de Gran Tarajal no se levantaría en El Palmeral, tal y como se había planteado el mandato anterior. La opción más factible para el Cabildo parece ser El Aceitún. A pesar del compromiso del nuevo equipo de gobierno en sacar el proyecto adelante, aún tendrán que pasar años para ver entrar a los usuarios por sus puertas.

María Fernanda tuvo que renunciar a la empresa de dependencia por falta de servicio

Penélope cuenta que es su hermana quien convive con Manuela, pero trabaja y son sus hijos quienes, en ocasiones, se quedan al cuidado. En otras, la mujer se tiene que quedar sola y lanza la pregunta ¿sabes lo que es irte de casa y dejar una persona sola hasta la una y media o las dos que llegan los niños del colegio?”.

Ante la falta de centros de día en Gran Tarajal, el año pasado le ofrecieron la posibilidad de acudir al centro de día de Puerto del Rosario, en la residencia sociosanitaria, ubicada en el barrio de El Charco. La familia de Manuela tuvo que decir que no. “Estas personas no están para moverlas mucho. No pueden estar todo el día en carretera. Me parece un trato inhumano”, insiste Penélope.

La solución consistía en que una guagua la recogiera a primera hora de la mañana y luego la devolviera a casa, en Gran Tarajal, por la tarde. Penélope entiende que no se construya un centro en cada pueblo, “pero tiene que haber algunos repartidos. Debe haber sedes distribuidas por toda la Isla y que la gente tenga una vida digna”.

“La opción de abrir centros de día debe ser planteada a medio y corto plazo. Entiendo que hay que buscar el espacio y construirlo, pero creo que hay que darse bastante prisa porque, en general, la población mayor siempre es la olvidada”, sostiene el encargado de elaborar el informe del Cabildo.

“Las previsiones son que, cada vez, haya más demanda de este tipo de recursos. Habrá cada vez más población con dependencia y mayor. Tanto en el conjunto del Estado como en la Isla. Si vamos por detrás, imagina el problema que podemos llegar a tener en unos años”, adelanta.

Si la ubicación de la futura residencia de Gran Tarajal ha levantado debate en la política insular, la del Centro de Atención Extrahospitalaria (CAE) de La Lajita no ha sido menos. Tras años de debate sobre su ubicación, el pasado mes de marzo el Ayuntamiento de Pájara cedía los terrenos para su construcción. Aún no hay proyecto. El informe también planteaba la necesidad de que se construyera un hospital en la zona sur de Fuerteventura.

En el informe, se cuestionaba la funcionalidad del servicio de ayuda a domicilio de la Ley de Dependencia. Además de recoger que las horas eran muy limitadas, lo que resultaba “insuficiente” para liberar a la persona cuidadora para que pueda trabajar, se señalaba que el dinero destinado a las empresas “no es proporcional” a las horas de servicio prestadas. “Se ha convertido en un negocio, más que en un servicio para la ciudadanía”, alertaba el documento. En el caso de municipios como Betancuria y Pájara se calificaba el servicio como “muy limitado” pues reduce el tiempo de las empresas.

“Aquí todo funciona fatal para las personas mayores”, insiste María Inés Acosta

María Fernanda Rojas vive en Costa Calma. Su madre murió hace apenas unas semanas después de llevar años con alzhéimer y un cáncer de mama desde hacía siete años. Falleció esperando la Ayuda a Domicilio de Dependencia del Gobierno de Canarias porque las empresas no tenían personal para asistirla. Su hija estuvo más de cinco años luchando por las ayudas de dependencia.

En un primer momento, desde Dependencia del Gobierno de Canarias le dieron la opción de ingresar a su madre en la residencia de Casillas del Ángel o acogerse a la ayuda económica. En ese momento, era de 715 euros. “Me daban diez horas de servicio a la semana que las repartía en dos o tres días”, cuenta.

Probó con las dos empresas adjudicatarias del servicio del Gobierno de Canarias y con las dos “fue fatal”. Cada día se encontraba con un nuevo revés. “A veces no venían. En ocasiones era porque no tenían personal y otras porque las auxiliares se cogían las vacaciones y, al final, me veía sola porque no tenían gente”.

A lo largo de estos años se encontró con que la empresa que tenía contratada seguía cobrando el servicio, pero no lo daba. A la desesperada envió cartas a Inspección de Centros del Gobierno de Canarias, Diputado del Común y Cabildo de Fuerteventura para ver qué estaba pasando. “No era normal que yo no tuviera el servicio, pero la empresa se cobraba el dinero igual”, denuncia. Así estuvo durante los meses de enero y febrero de este año hasta que renunció al servicio.

“Al final, la empresa me devolvió el dinero de esos dos meses y rescindió el contrato. Enviaron una carta en la que decían que no estaban de acuerdo con mis quejas. Luego, envié una carta al Gobierno de Canarias para ver qué hacía con el dinero que estaba destinado a la empresa de prestación de servicio. Nunca me llegaron a contestar”, explica.

María Fernanda coincide con otros familiares de pacientes con dependencia del sur de la Isla en lo mal que está la situación en la zona. Esta mujer explica que “la gente no quiere trabajar en estas empresas en el sur porque en los hoteles pagan mejor. Las chicas tienen que usar sus coches particulares y cobran sueldos de miseria. Eso hace que, a veces, no tengan personal en Costa Calma y las que están en Morro Jable o Gran Tarajal no quieran trasladarse porque les pagan poco”.

Durante todos estos meses, María Fernanda se vio sola cuidando a su madre. Hace unos años, tuvo que renunciar a su trabajo como jefa de restaurantes en un hotel para poder cuidar a sus padres. “Estoy triste. Después de lo que pasé y luché por la dependencia siento que ha sido para nada. Esto seguirá igual”, lamenta.

Penélope demanda un centro de día en Gran Tarajal donde poder llevar a su madre

Lydia Soto también sabe lo que es vivir con una persona mayor dependiente en el sur de Fuerteventura. Su padre, Celedonio, tiene 86 años y un grado tres de dependencia. Apenas puede caminar y sufre demencia. Desde hace tiempo tiene concedido el servicio de ayuda a domicilio del Ayuntamiento de Pájara, aunque no lo está recibiendo porque la trabajadora está de baja. “Estamos desde el año pasado y lo que lleva de este sin la ayuda a domicilio”, cuenta su hija.

Tras años de lucha, burocracia y mucho papeleo, en 2022 consiguió la ayuda de dependencia que asigna el Gobierno de Canarias. La prestación asignada era la ayuda a domicilio porque la del Ayuntamiento es solo un par de horas a la semana y “es insuficiente”.

“Nos dijeron que tenemos que movernos con las empresas que hay y me he movido, pero he visto muy poca seriedad. Han estado tres meses para contactar con nosotros. A mediados de junio, ha empezado a venir un trabajador de una de las empresas”, explica.

Ha tenido que empezar a pagar a la empresa hasta que el Gobierno de Canarias decida abonar el coste con carácter retroactivo. La situación de la dependencia en el sur de Fuerteventura es “denigrante y tercermundista”, confiesa la mujer molesta.

¿Por qué el Gobierno de Canarias no ha decidido contratar directamente a gente formada que preste esa ayuda a domicilio, en vez de a empresas que pagan poco y luego no funcionan? ¿De qué sirve hablar de una Ley de Dependencia si luego no ponen las herramientas adecuadas para que eso funcione?, se pregunta la mujer. Y responde: “Pura demagogia política”.

Lydia asegura que un centro de día sería una buena opción para poder llevar a su padre unas horas. Aboga por este tipo de centro en los pueblos. También se queja de la falta de una residencia en la zona sur. Solicitó plaza en la de Puerto del Rosario, pero están en lista de espera. “No sabemos ni en qué número estamos. Si mi padre sigue deteriorándose cognitivamente no podremos pagar dos cuidadoras permanentemente”, explica.

María Inés Acosta también echa en falta centros de día y residencias para mayores en el municipio de Pájara. “Aquí todo funciona fatal para las personas mayores”, insiste. Lleva meses sin tener la ayuda a domicilio del Ayuntamiento porque la persona que venía a su casa está de baja desde diciembre.

Su madre, de 78 años, tiene demencia senil y un grado dos de dependencia revisable. Solicitó la ayuda de dependencia del Gobierno de Canarias hace dos años. Hace unos meses le llegó la resolución, que le permitía contar con una ayuda a domicilio.

Tras recibir la respuesta, se puso a buscar una empresa que la pudiera prestar en el sur de la Isla. “En Fuerteventura solo hay dos empresas. Una de ellas tiene problemas para prestar el servicio en Pájara, Tuineje y Tiscamanita. No tiene servicios en estos pueblos. La otra empresa me ha dicho que sí podía venir”, cuenta. Y añade: “No me ha quedado más remedio que quedarme con la que hay”.

“Mi madre no recuerda tomarse el medicamento y tiene problemas de estabilidad a la hora de caminar. Tampoco se acuerda de lo que hizo esta mañana. ¿Por qué me dan, entonces, el segundo grado y me asignan una empresa a la que solo tengo derecho a cuatro horas semanales? Mi madre es una persona que no puede estar sola”, explica. “No pido que me pongan una persona todo el día, pero por lo menos que no me asignen una empresa que no va a cumplir las necesidades de la persona usuaria”, critica.

Comentarios

Vivo en la zona Norte, Cuido de una persona de 89 años, JAMAS SE HAN INTERESADO POR ELLA NADIE. RECHAZADA LA PETICIÓN DE AYUDA, A PESAR DE TRUBUTAR TODA UNA VIDA, ESTA COMPLETAMENTE ABANDONADA. NO SOLO ES EL SUR, LA ISLA ENTERA SE OLVIDO DE SUS MAYORES!!!!
Toda una vida trabajando duro y cotizando para al final llegar a la vejez - o enfermedad - y encontrarte con que no puedes disponer de servicios básicos necesarios elementales. Mientras, al mismo tiempo, el presidente del Gobierno de tu Comunidad , Fernando Clavijo, no se preocupa de ti, ni de los demás que estarán como tú, SINO DE LOS INMIGRANTES africanos que llegan en pateras: exigió a Madrid socorro para poder acogerlos. Y MADRID RESPONDIÓ, prometiendo que se crearán más infraestructuras y medios para recibir y ATENDER a los inmigrantes que vayan arribando. Que no les falte de nada... ¡ Y SIN HABER CONTRIBUIDO NUNCA, EN ABSOLUTO, Y SIENDO GENTE JOVEN Y SALUDABLE!
El abandono a nuestras personas dependientes y sus familiares es total en toda la isla. En La Oliva es una vergüenza.
Avergonzado de tod@s los polític@s. Hablar de este tema me revuelve las entrañas y no sabría por donde empezar. Había una residencia en Casillas que se quedaba pequeña, entonces construyeron otra en Puerto más moderna y con más capacidad ( 1 plaza más que la de Casillas). Trasladan a los residentes y cierran la de Casillas. Osea no han avanzado nada en plazas. Ahora la nueva consejera del Gobierno dice que lo ideal es que los mayores estén en sus casas y ahí van a volcar todo su esfuerzo. Mire señora a todos nos gustaría tener a nuestro mayores en casa hasta el final, pero hay una realidad que usted igual ni la conoce, llega un punto en que algunas personas no son capaces ni de alimentarse y hay que darles la comida por una sonda, por poner un ejemplo, eso es MUY MUY DURO y no todo el mundo está cualificado para ello, por eso son necesarias las residencias sociosanitarias, porque tienen que ser profesionales cualificados los que atienda a estas personas. Llega un momento que un familiar no puede hacerlo. El nivel 3 de dependencia que es el máximo que otorga la Comudidad Autónoma lleva una prestación económica de poco más de 500 euros, y se tienen que destinar a que una empresa preste el servicio (10 HORAS SEMANALES), osea MISERIA. Lo que digo es solo una parte de la realidad. Mucho ánimo a tod@s nuestr@s mayores, familiares y cuudadores. A nuestr@s politic@s pónganse a trabajar de una vez por nuestros viejit@s que gracias a ellos estamos aquí
Todo lo que está pasando con los mayores es muy triste. El gueberno pide dinero de estado por hacer una nueva autovía sin sentido. Pero para las personas mayores, nada. Vergonzoso.
Todo lo que está pasando con los mayores es muy triste. El gueberno pide dinero de estado por hacer una nueva autovía sin sentido. Pero para las personas mayores, nada. Vergonzoso.
la mayor desgracia que caido en estas islas son los golfos politicos que nos gobiernan
Fuerteventura es asi. La isla donde todos se quedan tan tranquilos, Mientras las autoridades políticas locales gastan 64 millones de euros en un aeropuerto de drones no tripulados, sin peticion alguna, ni autorización por parte de la agencia espacial europea.... mientras no tenemos dinero para nuestra población de mayores, gracias a la cual, estamos todos aqui. Chiquitas gracias, que no haya dinero para hacer llegar agua a todas las casas, pero en cambio si lo hay para invertir en eventos privados deportivos para que participen unos pocos, y de espectadores menos aun... eso si, el lucro ya sabemos para que cuñado va, segun que institución pública. Fuerteventura es asi, nos vamos a la playa pq hace bueno, el mismo dia que se lleva a cabo una manifestación por la falta de agua. Aqui solo importa que sigan llegando ricos, construyendo casas tan lujosas que hacen que los pueblosbhumildes de antaño se esten convirtiendo en barrios de mansiones millonarias, y total, ni para vivirlas ..... no, para alquiler turistico, del cual nuestra marquesa de las dunas esta hasta las orejas, pero no de enfado, como deberia ser, no... pq es la que mas viviendas vacacional tiene. Aqui todos barren para casa siempre, Si es que tiene dinero para un cepillo.
7 tene: ¡¡ TOTALMENTE DE ACUERDO!!
Llevo desde Julio del 2020 encerrado en casa cuidando de una persona mayor invalida. Por ayudas no solo no la he recibido de las instituciones ..... encima hasta sus propios hijos y hija la han olvidado. Ya esta bien de maltratar a la gente que lucho por todo lo que hoy tenemos. Cuidemos a nuestros antepasados, es señal de toda sociedad avanzada.... aqui se ve que ni para atras avanzamos. Asi de desarrollada esta la sociedad canaria. Asi, asi.
Ley de dependencia obsoleta, y que encima que jamas se ha cumplido. Pero hay dinero para robar, eso si, siempre.

Añadir nuevo comentario