ECONOMÍA

La cabra majorera, pendiente del centro de sementales

Los avances para depurar la raza y limpiar las cabañas de la Isla precisan de la ejecución de este proyecto para conseguir mejorar la producción lechera

Eva Cano, técnico de la asociación, Iriome Perdomo, presidente, y Dahelire Hernández, veterinaria. Fotos: Rafael Fuentes.
María José Lahora 1 COMENTARIOS 27/10/2020 - 07:16

Los ganaderos de la Isla están cada vez más concienciados de que “la clave del futuro del sector está en la mejora genética de la raza majorera”. Así lo defiende la técnico de la Asociación de Criadores de Cabra de Fuerteventura, Eva Cano, encargada de evaluar el programa de cría y estudio genealógico que dirige el genetista Gabriel Fernández de la Sierra. Sin embargo, todos los avances realizados en los últimos años para depurar la raza podrían caer en saco roto si no se activa el centro de sementales de Fuerteventura.

Los responsables y técnicos de la asociación explican que existe un proyecto aprobado y unos terrenos reservados en el municipio de Antigua para su edificación. Sin embargo, falta financiación para su puesta en marcha.

El centro albergaría una selección de machos “sementales limpios” que permitirían perpetuar la raza pura majorera, toda vez que se está desarrollando un plan sanitario para limpiar las cabañas. El presidente de la asociación, Iriome Perdomo, destaca además que este proyecto no solo redundaría en la mejora de la raza majorera en la Isla, sino que podría convertirse en “otra vía de negocio” para el sector.

El centro de sementales de la raza majorera persigue “la mejora sanitaria, morfológica y productiva de los animales”, comenta el presidente de la asociación. Dice ser consciente de que “aún queda mucho por hacer en materia de depuración, pero ya hay una importante base”.

Sin embargo, faltan sementales que permitan mejorar la cabaña y, por consiguiente, la producción de leche. Las ganaderías que han trabajado para limpiar sus rebaños se topan con el inconveniente de que no pueden “cubrir su cabaña, al no entrar machos nuevos”. “El problema de consanguinidad va a ser terrible”, puntualiza la veterinaria Dahelire Hernández.

La veterinaria expone el ejemplo de la ganadería y quesería Felipa La Montañeta, una de las ocho que están adscritas al plan sanitario y que, con cerca de un millar de ejemplares de cabra, “cuenta ya con 600 en la zona limpia y 300 en la mala”.

Dahelire Hernández asegura que “solo con el manejo, sin medicamentos, esta explotación ha logrado duplicar su corral de animales sanos y cuenta con un positivo balance de mortalidad del 25 por ciento en el grupo de las enfermas, que se reduce al cinco por ciento en el de las sanas”.

Plan sanitario

El proyecto del plan sanitario se desarrolla desde hace tres años en colaboración con el departamento de Salud Animal de la Universidad de Murcia, que dirige Christian de la Fe. Un total de 11 ganaderías se encuentran en el núcleo de selección del control lechero a través del programa de genética, de las que ocho están implicadas, además, en el control sanitario para erradicar hasta cuatro tipos de enfermedades, explica Dahelire Hernández.

Iriome Perdomo ve en el interés por la raza majorera otra vía de negocio para el sector ganadero: la exportación de semen

“Con el plan sanitario estamos garantizando que los animales sanos no transmitan ninguna enfermedad y podríamos también exportar estos ejemplares a otras islas”, explica. La asociación controla 26.000 cabezas de ganado y suma un total de 36 socios.

El objetivo final del plan sanitario es contribuir a la creación del futuro centro de sementales. “Tenemos ya el proyecto y machos sementales limpios. Ahora su puesta en marcha depende de las instituciones”, explica Dahelire.

“Del futuro centro de sementales se beneficiaría toda Canarias, dado que, al no transmitir enfermedades, podrían exportarse a otras islas”, añade Iriome Perdomo, que ve en el interés por la mejora de la raza majorera otra vía de negocio para el sector ganadero junto a la producción de leche o la industria cárnica: la exportación de semen majorero. Asegura que han recibido solicitudes de distintos países y recuerda que “es más fácil transportar el semen que los propios animales”.

Desde hace tres años, la asociación se encuentra analizando la puesta en marcha del centro de sementales con las distintas instituciones, pero sin ver avance alguno en este sentido, explica Perdomo. “Al final han llegado los machos pero no tenemos el centro”, comenta. Estos ejemplares se encuentran en la actualidad en una granja “prestada”, donde no pueden permanecer eternamente.

Eva Cano expone que los ganaderos están apostando por el trabajo de la asociación de criadores, conscientes de que la mejora genética es sinónimo de mejora del rendimiento de la ganadería. “Con menos animales se produce más y mejor leche”, enfatiza.

La veterinaria señala que, por el contrario, aquellas ganaderías que no realizan la valoración de sus cabras para seleccionar los ejemplares “en pureza” cuentan con muchas más cabras con características ajenas a la raza majorera y que, en cambio, en las ganaderías que sí realizan una selección apropiada y forman parte del programa genético “cada vez la pureza de la raza es mayor”.

La raza majorera se encuentra repartida por toda Canarias e incluso pueden encontrarse ejemplares en la Península. En Lanzarote suman siete las explotaciones de raza majorera, una de las cuales se encuentra en el programa de control lechero, ganaderías a las que están dando cobertura desde la asociación de Fuerteventura, al igual que a otras de El Hierro o La Palma que han solicitado su colaboración. En Gran Canaria, cuentan con una asociación propia. El centro de sementales de Fuerteventura sería el primero de Canarias dedicado a la raza majorera.

Rentabilidad

Iriome Perdomo, ganadero al frente de Finca Benigno, que heredó de su abuelo, expone las dificultades a las que se enfrenta el sector. Asegura que existe mercado para vender la producción.

Todos los avances realizados en los últimos años para depurar la raza podrían caer en saco roto si no se activa el centro de sementales de Fuerteventura

Sin embargo, mantener la explotación requiere cada vez una mayor inversión. “Los costes sanitarios y en comida son elevados..., con el agravante de la doble insularidad”, destaca entre los factores que impiden que las granjas sean rentables.

A ello se suman los altos requerimientos, las trabas burocráticas y el retraso en el cobro de las subvenciones. “Frente a las mejoras que ha aportado la modernización en el sector primario, la burocracia y los impedimentos a los que nos enfrentamos los ganaderos, cada vez mayores, han supuesto un sobrecoste y, sin embargo, el precio del queso no se ha incrementado desde que yo tengo uso de razón”, concluye.

“El futuro de la ganadería está en la mejora genética”

El primer cometido de la Asociación de Criadores de Cabra de Fuerteventura, creada en 2010, fue poner en marcha un estudio genealógico para comprobar en qué situación se encontraba la raza majorera. Esto dio pie a ejecutar el programa de cría que lleva a cabo el genetista Gabriel Fernández de la Sierra. Anualmente se inscriben los ejemplares en el libro genealógico.

En las ganaderías del núcleo de selección se evalúa la calidad de la producción a través de los controles lecheros, un programa abierto a todos los ganaderos. En estas explotaciones se realizan, además, los cruces con los machos mejorantes para disponer de las futuras “madres de sementales”, explica Eva Cano, técnico de la asociación.

La Isla cuenta con 10.000 ejemplares vivos inscritos en el libro genealógico

“No solo evaluamos la raza majorera en general, sino que trabajamos dentro de cada explotación. El objetivo es encontrar los animales mejorantes dentro de cada granja del núcleo de selección que, más tarde, pasarán al programa de agentes infecciosos que desarrolla la veterinaria Dahelire Hernández y que permitirá disponer de los machos limpios que formarán parte del futuro centro de sementales.

Fuerteventura cuenta en la actualidad con 10.000 ejemplares vivos inscritos en el libro genealógico de los 30.000 valorados. Eva Cano defiende que “el futuro de la ganadería está en la mejora genética y eso los ganaderos lo tienen claro”. Comenta también el respaldo del sector a estos programas porque se completan con cursos y viajes de formación a otras explotaciones donde pueden ver in situ las mejoras, lo que supone un “aliciente para el ganadero”.

Comentarios

La clave esta en la comercializacion del queso. Lo del centro de sementales es una ocurrencia mas, que solo beneficia a los que viven de ella (cuatro veterinarios y alguno mas).

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