La Asociación Española de Guardias Civiles (AEGC) ha denunciado un nuevo acto vandálico contra un agente destinado en la isla de Fuerteventura, cuyo vehículo particular fue atacado con dos cócteles molotov, causando daños materiales valorados en más de 700 euros.

En un comunicado difundido este jueves, la AEGC subraya que se trata del segundo incidente que sufre el mismo guardia civil, después de que hace dos años le pincharan las cuatro ruedas del coche. Según la organización, los hechos reflejan una “premeditación” y una “intencionalidad de causar un grave daño”, que en esta ocasión no provocó daños personales.

La asociación señala que el agente deberá afrontar los gastos a través de su seguro particular, salvo que se tramite un expediente de resarcimiento a través de la Guardia Civil, dado que, según afirma la AEGC, los hechos “evidencian un ánimo de venganza por su labor en el cuerpo”.

Ante este nuevo ataque, la AEGC reitera su petición al Gobierno para que los guardias civiles sean reconocidos como “profesión de riesgo” y se les considere “autoridad” a efectos penales, lo que implicaría penas más severas para quienes los agredan.

“Actos como estos justifican nuestra exigencia”, afirma la asociación, que ha puesto a disposición del agente su servicio jurídico con el objetivo de lograr “la mayor condena posible para el autor o autores”.