El doctor Arístides Hernández Morán, de 94 años, ha fallecido en Puerto del Rosario, ciudad que en 1995 lo distinguió con el título de Hijo Adoptivo para reconocer así la labor social y médica que realizó durante décadas en una isla sin apenas medios sanitarios.

El doctor contaba con numerosos reconocimientos sociales e institucionales, habiendo sido Premio Fuerteventura en la modalidad de hijo adoptivo otorgado por el Cabildo insular.

Contaba además con la Orden Civil de Sanidad, concedida por el Ministerio de Sanidad en el 2005; tenía la Medalla de Plata del Colegio Oficial de Médicos, la Cruz de la Orden al Mérito Militar, era presidente de Honor y Medalla de Oro de Cruz Roja Española y Medalla de Oro de Canarias en el año 2010, entre otros reconocimientos.

El presidente del Cabildo de Fuerteventura, Blas Acosta, en nombre de toda la institución, lamenta el fallecimiento de don Arístides Hernández Morán, "una gran pérdida para la Isla".

Las banderas del Cabildo lucirán a media asta en señal de luto por tan triste pérdida.

El presidente de la Corporación insular extiende sus condolencias a familiares y amigos de Arístides Hernández Morán.

Condolencias desde el Ayuntamiento

Esta triste noticia llega pocos días después de que el Ayuntamiento de Puerto del Rosario aprobara en pleno la propuesta de concesión de la Medalla al Mérito en el Trabajo al doctor.

Desde el Ayuntamiento capitalino han mostrado sus condolencias por el fallecimiento de don Arístides Hernández Morán. El alcalde, Juan Jiménez, en nombre de la corporación, ha destacado su pesar por la pérdida de “una persona muy querida en la isla de Fuerteventura, quien contaba con numerosas distinciones sociales e institucionales, entre ellas habiendo sido declarado Hijo Adoptivo de Puerto del Rosario en el año 1995, no solo por su enorme compromiso social, sino por mantener una vocación solidaria a favor de los más desfavorecidos. Una de las personas que han contribuido a dejar huella y un legado social, cultural y económico para las generaciones venideras de Fuerteventura”.

Otros colectivos como los políticos han mostrado también sus condolencias. En este sentido, el presidente del PP de Fuerteventura, Fernando Enseñat, en nombre de todos los cargos públicos, orgánicos y afiliados, ha mostrado su pesar por la pérdida de un “gran médico que ayudó a miles de familias pero, ante todo, una gran persona que luchó por el presente y el futuro de la isla de Fuerteventura, por las carencias históricas de la isla de nuestra isla. Su lucha por un futuro mejor no debe caer en el olvido pues de ello depende la calidad de vida de las próximas generaciones”.

Natural de Tenerife, aunque vivió la mayor parte de su vida en Fuerteventura, Hernández fue impulsor de la Denominación de Origen del Queso Majorero.

Uno de sus últimos proyectos fue poder dotar a Fuerteventura de un hospital geriátrico, una iniciativa que no pudo llegar a ver.

Además, jugó un papel importante en la medicina del siglo XX en Fuerteventura, ya que en 1954 realizó un mapa sanitario de la Isla, determinando los focos de las fiebres tíficas y paratíficas y puso en marcha una campaña de quimioprofilaxis que permitió erradicar la tuberculosis a nivel insular.