El presidente del Cabildo de Fuerteventura, Blas Acosta, ha expresado con claridad su apoyo al proyecto que el escultor vasco Eduardo Chillida ideó para la montaña de Tindaya, que él aboga por construir como continuación del eje cultural que César Manrique creó en Lanzarote.

"Si de mí dependiera, el proyecto se haría", ha señalado Acosta la cadena COPE en Canarias. "Me mojo, personalmente creo que es una de las obras que se deben hacer en Fuerteventura. Creo que formaría un eje cultural con César Manrique en la isla de Lanzarote".

Estas palabras de Acosta contrastan con la posición de su consejero de Patrimonio Histórico, Andrés Briansó, de Podemos, que a principios de mes anunció a varios medios, Efe entre ellos, que el nuevo equipo de gobierno de Fuerteventura optaba por dar carpetazo al proyecto de Chillida y prefería proteger toda la montaña.

Acosta ha mantenido silencio sobre esta polémica en las últimas semanas. Hasta ahora, cuando se le ha preguntado por el anuncio de su socio de gobierno sobre Tindaya, solo había señalado que consideraba que Fuerteventura tenía otras prioridades que atender con más urgencia, en materia de sanidad, agua e infraestructuras.

Ahora, en la COPE, ha expresado sin ambigüedad su apoyo a la idea de Chillida de vaciar parcialmente la montaña para convertirla en un gran monumento, porque cree que podría constituir un eje cultural que conectara con la obra de Manrique en Lanzarote y con la de Pepe Dámaso en el sur de Fuerteventura, en el barranco de los Canarios.

"Ese eje cultural aportaría economía a Fuerteventura, como en Lanzarote la están aportando los centros de César Manrique", ha argumentado el dirigente socialista, que cree "muy necesaria" la obra con la que soñó Chillida si se quiere dotar a la isla de un atractivo que ofrecer al turista adicional al sol y la playa.

"No podemos vivir solo del sol y la playa y de la demanda por estos factores. Tenemos las mejores playas de Canarias, pero tenemos otra parte, un territorio que debemos utilizar para crear economía y no podemos ser demagogos en este sentido. La isla de Lanzarote es el ejemplo claro", ha añadido.

"Ese eje cultural, con Tindaya y el Mirador de los Canarios, aportaría economía a Fuerteventura, como en Lanzarote la están aportando los centros de César Manrique"

Acosta ha recordado que la Fundación Tindaya, el Gobierno de Canarias y el Cabildo de Fuerteventura contrataron hace tiempo un estudio para analizar el proyecto si es viable técnico y económicamente, cuyos resultados "se darán conocer en octubre".

"Luego, ya veremos en el pleno, si hay mayoría, para poder desarrollarlo", ha matizado el presidente del Cabildo, que gobierna al frente de un tripartito formado por PSOE, Podemos y Asambleas Municipales de Fuerteventura-Nueva Canarias.

El presidente del Cabildo sostiene que hasta la fecha "se ha dado publicidad a las opiniones contrarias" que cuestionan el proyecto de Chillida y su impacto ambiental y patrimonial sobre la montaña de Tindaya, que alberga grabados podomorfos de tiempos prehispánicos.

Sin embargo, no oculta sus críticas a cómo se han gastado los 24 millones dedicados hasta el momento por las administraciones públicas de Canarias a ese proyecto sin llegar a iniciarlo. "Yo lo considero un robo, un fracaso, ¿Dónde ha ido ese dinero? Lo tendría que decir el Gobierno de Canarias para que lo sepan los canarios. Habrá que ver quién los pagó, a quién se les pagó y porqué se les pagó, tenemos derecho todos a saberlo", ha añadido.

El presidente del Cabildo de Fuerteventura alega, además, que la obra de Chillida es compatible con la conservación de los grabados aborígenes y del "misticismo de la montaña".