Las familias se pueden enfrentar a numerosos obstáculos a la hora de cuidar a sus seres queridos mayores. Entre estos problemas está la selección del personal adecuado para que vele por ellos. Además, se debe seleccionar una situación de vida que mantenga al ser querido seguro y cómodo al mismo tiempo.

Contratar a un profesional en la propia casa permite a la persona mayor vivir en casa con comodidad. Esto proporciona mayor calidad de vida. Por eso, el cuidado de personas mayores y ancianos a domicilio se ha vuelto una tendencia muy popular. Genera menos estrés y los padres, abuelos o tíos no están expuestos a la depresión y ansiedad de estar en un sitio que no ofrezca la calidez del hogar.

A continuación, se exponen las ventajas más importantes de contratar a un cuidador a domicilio para su ser querido mayor.

1. Reduce el riesgo de caídas

Las caídas son unas de las principales causas de infecciones en heridas, lesiones y fracturas. Las personas de mayor edad son más susceptibles a las caídas debido a que disminuye su fuerza muscular y visión.

Contar con un cuidador en el hogar mientras la familia no está puede ayudar a evitar que un ser querido se caiga y se lesione. El cuidador también puede asegurarse de que la casa esté limpia.

Otra zona de la casa en la que se producen accidentes es el baño, pero un cuidador a domicilio puede ayudar a lavarse y asearse para que el entorno sea más seguro para el adulto mayor del cual es responsable.

Muchas personas mayores quieren envejecer en su casa y algunas necesitan ayuda para seguir viviendo en ella de forma segura y agradable. Afortunadamente, hay expertos en atención domiciliaria en los cuales los ancianos pueden confiar.

2. Fomenta una mejor nutrición

Los cuidadores a domicilio pueden ayudar a los ancianos en la preparación de las comidas, lo que implica seleccionar recetas nutritivas para cocinar durante la semana e ir a la tienda de comestibles para asegurarse de que haya artículos saludables en el hogar.

Una buena dieta es esencial para los mayores, ya que reduce el riesgo de hipertensión, diabetes, obesidad y enfermedades cardiovasculares.

Una alimentación sana también puede ayudar a los mayores a ganar fuerza física y a dormir mejor por la noche.

3. Ofrecen compañía

Muchas personas van envejeciendo y en ese proceso se consideran aisladas. Por diversos motivos, como problemas de movilidad, incontinencia o sobrepeso, pueden retirarse de las actividades sociales.

Los cuidadores a domicilio pueden ayudar a las personas mayores a obtener la conexión social que quieren y desean, así como a abordar las dificultades e inseguridades que les llevan a retirarse de las actividades sociales.

4. Vigilancia para la administración de medicamentos

Debido a los cambios de salud que experimentan los ancianos a medida que envejecen, es normal que tomen varias recetas. Administrar varios medicamentos puede ser un reto, pero si se hace de forma incorrecta, su ser querido puede sobre medicarse y acabar en el hospital.

Un cuidador a domicilio, en cambio, puede recordar a la persona mayor que tome las recetas y las dosis necesarias en los momentos precisos y enseñarle a utilizar las aplicaciones de gestión de la medicación.

Si un ser querido de edad avanzada padece una enfermedad grave y necesita apoyo con las tareas cotidianas, póngase en contacto con Beeping, un reputado proveedor de cuidadores de asistencia domiciliaria que de manera gratuita ofrece perfiles del personal adecuado para que las familias elijan al mejor.

Estos cuidadores están disponibles las 24 horas del día, no hay cargos ocultos en los contratos y se asegura la completa satisfacción con todo el servicio de atención domiciliaria.

5. Concede a la persona mayor la posibilidad de disfrutar de su hogar

En lugar de trasladarse a una residencia asistida o recuperarse en un hospital o centro de rehabilitación, tu ser querido puede permanecer en su casa.

Estar en un entorno familiar puede mejorar la salud mental, física y emocional del adulto mayor. La atención domiciliaria es una alternativa que elimina la necesidad de que su ser querido comparta un cuidador con otras personas mayores.