El Club de la Bici Verde, de Fuerteventura, junto a un grupo de colectivos del Archipiélago, ha reclamado este viernes impulsar la bicicleta como “aliada en la crisis sanitaria, ambiental y económica”, para hacer frente a la situación derivada de la pandemia de coronavirus.

Por ello, han reclamado a las instituciones que “pongan en marcha las medidas necesarias que posibiliten a la ciudadanía una movilidad sostenible y con las máximas garantías de seguridad sanitaria y vial”.

“La crisis sanitaria del coronavirus está obligando a realizar cambios drásticos y urgentes en la movilidad urbana y metropolitana, con reducciones en el número de desplazamientos y con nuevos criterios de distanciamiento físico para garantizar la salud”, señala la asociación.

Según el colectivo, “esto implica un nuevo paradigma de la movilidad de los próximos meses y años. Estos cambios se están ejecutando en varios países europeos como Francia, Alemania o Gran Bretaña, con planes integrales para posicionar a la bicicleta como vehículo principal del país para combatir la Covid-19”.

Así, recuerdan que la propia ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, anunció que le parecía “una idea buenísima” y que pediría a sus equipos sobre el clima y la calidad del aire “que lo estudien” de forma conjunta con el resto de ministerios y gobiernos autonómicos.

El ministerio ya ha solicitado a la Federación española de municipios y provincias (FEMP) que los municipios adopten medidas. El Ministerio de Sanidad aconseja desplazamientos andando o en bicicleta, que “son los que mejor garantizan el distanciamiento interpersonal recomendado”.

“Cabe destacar que la Covid-19, pandemia que afecta especialmente al sistema respiratorio, está incidiendo con una mayor gravedad en los territorios con un aire más contaminado, hecho que corroboran ya diversos estudios científicos”, añade la asociación.

Por tanto, agrega, “parece sensato evitar a toda costa recuperar las tasas de uso previo del vehículo privado motorizado, causante en gran medida de la contaminación que teníamos en nuestras ciudades”.

“En el contexto canario destacamos algunas fortalezas sociales y económicas, pero también algunas de las resistencias detectadas: como la imagen de la bicicleta únicamente como deporte, la incorrecta percepción del riesgo y la falta de conocimiento de las fuerzas del orden”, que en algunas ocasiones han apercibido a ciclistas “que iban simplemente a hacer la compra, uno de los supuestos permitido en el real decreto que regula el estado de alarma”, añade la asociación.

Sin duda, subraya el colectivo, la bicicleta “es el vehículo más eficaz en desplazamientos de uno a siete kilómetros”.