El pasado 13 de febrero, durante la visita a algunos yacimientos realizados por miembros de la asociación El Efequén, guiada y coordinada por arqueólogos, pudieron “constatar el expolio reciente de una singular estructura incluida en la Carta Arqueológica Insular”.

Desde la asociación destacan que “el deterioro y abandono de nuestro rico y poco estudiado patrimonio arqueológico no son nuevos” y que son “numerosas” las ocasiones en que, en los últimos años, “miembros de de esta asociación han denunciado y puesto en conocimiento del Departamento de Patrimonio del Cabildo multitud de acciones dañinas sobre algunos yacimientos de la isla”.

Desde el colectivo Efequén no observan, por parte de los organismos competentes, “medidas tendentes a inspeccionar, custodiar y proteger este rico patrimonio cultural e histórico que nos vincula con nuestro pasado precolonial”.

“Somos conscientes de la falta de recursos humanos que en este terreno tiene Fuerteventura” aclaran, aunque lamentan que para toda la Isla “solo se cuente con una inspectora interina y con ningún agente o vigilante patrimonial” pues consideran que “difícilmente” tan solo una persona “pueda ejercer una labor de control y vigilancia sobre más de medio millar de yacimientos catalogados” en Fuerteventura.

Desde El Efequén ya ha comunicado a la Inspección Patrimonial del Cabildo y a la Alta Inspección de Patrimonio Cultural del Gobierno de Canarias, “no solo el expolio observado el día 13, sino algunas de las medidas”.

Entre ellas, destacan el aumento significativo de inspectores de patrimonio así como personal técnico. También reclaman la creación de un cuerpo de agentes patrimoniales y la creación de una planificación educativa e informativa para concienciar a la población.

Además, proponen se proponen medidas de protección de algunos yacimientos mediante vallados integrados y paneles informativos así como sanciones “que sean ejemplares y disuasorias”.

Desde la asociación consideran que el patrimonio arqueológico de Fuerteventura se encuentra en un momento “crítico” donde las medidas de vigilancia deben ser tomadas “con urgencia y eficacia si queremos conocer, aprender y disfrutar de un legado único que está siendo irremediablemente transformado”.