
Una burla al Charco: el falso desmantelamiento de la Central de Las Salinas

Como vecino del Charco en Puerto del Rosario, y ex secretario de laAsociación Los Hornos del Charco, además de actual secretario de la recién constituida Asociación Unidos por el Charco, no puedo aceptar en silencio el reciente anuncio del Ayuntamiento respecto al supuesto “inicio del desmantelamiento” de la Central eléctrica de Las Salinas. Lo que se pretende presentar como una mejora para nuestro barrio y la ciudad no es más que una operación cosmética y una auténtica tomadura de pelo.
El Ayuntamiento ha publicitado que comienza el desmantelamiento, pero la realidad es bien distinta: solo se retira uno de los motores, y no por iniciativa pública, sino por decisión interna de la propia empresa. Nada hay de planificación municipal, ni de defensa del interés general, ni de compromiso con la salud de los vecinos. Lo que se anuncia como avance no es más que un ajuste técnico privado.
La burla es aún mayor si consideramos que, gracias al Gobierno de CC-PP, se ha autorizado recientemente la implantación de dos subestaciones en el Barranco de La Herradura, destinadas a seguir sosteniendo la producción energética basada en combustibles fósiles. Se trata de infraestructuras que no reducen la contaminación, sino que la desplazan, y que además estarán a apenas 600 metros de un centro educativo, comprometiendo la salud de niños y trabajadores del entorno.
Trasladar la contaminación no es solución: es irresponsabilidad.
Llevamos más de 50 años escuchando promesas de traslado: primero Monteagudo, luego Agando, ahora Zurita. Pero seguimos sin saber absolutamente nada sobre el modelo real que se pretende implantar. ¿Será centralizado como ahora, o descentralizado con subestaciones distribuidas? ¿Tendrá protagonismo la energía renovable, o se continuará quemando combustible contaminante? Incluso se llega a plantear alejar la central del punto de conexión del cable submarino por el que se suministra energía a la isla vecina, algo técnica y económicamente absurdo.
Demasiadas incógnitas, cero planificación.
Mientras tanto, somos los vecinos quienes seguimos respirando el aire contaminado que emite esta central ubicada en pleno barrio y ciudad. Somos nosotros quienes vivimos con sus ruidos, olores, impactos y riesgos.
Por eso, exigimos algo básico, sensato y urgente:
¿Para cuándo un estudio epidemiológico independiente que compare las tasas locales de enfermedades respiratorias y tipos de cáncer con las de municipios similares que no cargan con una industria contaminante en pleno núcleo urbano?
Si de verdad se quiere proteger la salud de la población y el futuro urbano de Puerto del Rosario, hace falta coherencia, planificación y valentía política, no titulares vacíos ni gestos simbólicos.
El Charco, su gente y su historia merecen respeto, no humo.











Comentarios
1 Nicolás Cabrera Mié, 05/11/2025 - 23:16
2 Bobamequeo Jue, 06/11/2025 - 08:22
3 GofiónQuemao Jue, 06/11/2025 - 16:53
4 Fran Santana Jue, 06/11/2025 - 21:23
5 Bobamequeo Mié, 12/11/2025 - 18:30
6 AAVV Las Lojas. Jue, 13/11/2025 - 08:01
Añadir nuevo comentario