La Guardia Civil de Fuerteventura el pasado día 24 de marzo con motivo de la intensificación de servicios para la protección de especies protegidas en la citada isla y evitar el marisqueo furtivo, denunció a una persona con antecedentes por los mismos hechos, por capturar una especie de marisco prohibida durante todo el año como es el mejillón, además de Lapas, las cuales también están prohibidas su captura actualmente, en el municipio de la Oliva.

Conocimiento de los hechos

La Guardia Civil en el ejercicio de sus funciones específicas en proteger las de especies protegidas en la citada isla y evitar el marisqueo furtivo, durante el servicio llevado a cabo de vigilancia del litoral costero de Tindaya se observó a una persona en una zona rocosa y de difícil acceso la cual se encontraba mariscando.

Por ello, los Guardias Civiles de servicio al percatarse que la persona abandonaba el lugar con un turismo, procedieron a identificar al conductor del mismo, y pudiéndose observar como en el interior del mismo llevaba en el asiento trasero un saco y un capazo con 2,3 kg de mejillones “Perna Perna” y 4,5 Kg de Lapas.

El objetivo de la persona denunciada era la de beneficiarse económicamente mediante la comercialización de los ejemplares capturados, de los cuales está prohibida su captura, consiguiendo con ello diezmar aún más la ya preocupante población de la especie y dificultando su recuperación.

La Guardia Civil está comprometida en la lucha contra el marisqueo furtivo y la protección de especies protegidas, como la “Perna,perna” Mejillón Canario y la “Patella Candei” conocida como Lapa Majorera, la cual se encuentra en peligro de extinción, dando lugar a la intensificación de intervenciones de este tipo para preservar los recursos marisqueros de la isla, los cuales se encuentran gravemente diezmados.

La captura del Mejillón Canario está prohibido durante todo el año en todo el litoral costero de Fuerteventura por la Orden de 16 de Julio de 2004 (BOC nº 141 DE 22 DE Julio de 2004) en la que se estableció la veda de esta especie por la preocupante situación en la que se encontraba la especie, peligrando su permanencia y futuro desarrollo.

Infracción

A consecuencia del servicio la Guardia Civil intervino los ejemplares y los devolvieron al mar con vida, tramitando la correspondiente denuncia por infracción administrativa grave al artículo 70.3 la Ley 17/2003 de Pesca de Canarias, la cual es remitida a la Viceconsejería de Pesca del Gobierno de Canarias.

Las infracciones por estos hechos pueden ser sancionados con multa de 301 a 60.000 euros, así como el decomiso de los productos o bienes obtenidos y los aparejos o útiles utilizados.

Por todo ello, se procedió a remitir la correspondiente infracción de los hechos descritos a la Consejería de Pesca del Gobierno de Canarias.